jueves, 27 de enero de 2011

Historia de la Huella Dactilar


Juan Vucetich

Nacido el 20 de julio de 1858 en la isla de Hvar (en italiano, Lesina) en el archipiélago de Dalmacia (actual Croacia) el tal vez antropólogo Ivan Vučetić (se desconocen sus estudios) se estableció en Argentina, en 1882, a la edad de 23 años.

Ya nacionalizado con el nombre de Juan Vucetich, ingresó en 1888 al Departamento Central de la Policía de la provincia de Buenos Aires en la ciudad de La Plata. Inicialmente empleado en la Contaduría con el grado de meritorio, un año y medio después fue designado Jefe de la Oficina de Estadísticas, creó después la Oficina de Identificación Antropométrica y posteriormente el Centro de Dactiloscopía del que fue Director.

El 1 de septiembre de 1891 Vucetich hizo las primeras fichas dactilares del mundo con las huellas de 23 procesados. Luego de verificar el método con 645 reclusos de la cárcel de La Plata, en 1894 la Policía de Buenos Aires adoptó oficialmente su sistema.

En 1905 su sistema dactiloscópico (inicialmente denominado “icnofalangeometría”) fue incorporado por la Policía Federal de Argentina. En 1907 la Academia de Ciencias de París informó públicamente que el método de identificación de personas desarrollado por Vucetich era el más exacto conocido en ese momento.

Cuando en 1911 se sancionó la Ley n°: 8.129 de enrolamiento militar y régimen electoral, se lo adoptó para la identificación de los varones argentinos mayores de 16 años.

Vucetich enviudó de sus dos primeros casamientos. Luego de protestas públicas realizadas en Argentina en 1917 contra de la obligación de identificación general de las personas, que se asociaba con su nombre, se casó por tercera vez con una estanciera y se radicó en la población de Dolores donde, enfermo de cáncer y tuberculosis, falleció el 25 de enero de 1925.

Honrando sus méritos, se bautizó con su nombre a la Escuela de Policía de la Provincia de Buenos Aires y al centro policial de estudios forenses de Zagreb, Croacia.

La identificación de personas por sus huellas digitales

Pulgar derecho de Francisca Rojas, primer asesino identificado por sus huellas digitales.

En las antiguas Babilonia y Persia se usaban las impresiones dactilares para autenticar registros en arcilla, pues ya se conocía su carácter único.

En 1883 el francés Alphonse Bertillon propuso un método de identificación de personas basado el registro de las medidas de diversas partes de cuerpo humano. Su método, adoptado por las policías de Francia y otras partes del mundo, tuvo un estrepitoso fracaso cuando se encontraron dos personas diferentes que tenían el mismo conjunto de medidas.

El uso de los relieves dactilares fue por primera vez objeto de un estudio científico por el antropólogo inglés Francisco Galton (1822-1911), quien publicó sus resultados en el libro Huellas dactilares (1892). Los mismos verificaron tanto la invariabilidad de las huellas digitales a lo largo de toda la vida de un individuo, como su carácter distintivo aún para gemelos idénticos. Los estudios de Galton estuvieron orientados a la determinación de las características raciales hereditarias de las personas (sobre las que las huellas digitales no podían dar información) y determinó algunas características de las huellas que todavía se usan hoy en día para su clasificación.

En base a las mismas, Galton propuso usarlas para la identificación personal en reemplazo del inexacto sistema Bertillon, entonces en uso.

Los 40 rasgos propuestos por Galton para la clasificación de las impresiones digitales fueron analizados y mejorados por el investigador de la Policía de la provincia de Buenos Aires Juan Vucetich, a quien el Jefe de Policía de la Provincia de Buenos Aires Guillermo Núñez, le había encomendado sentar las bases de una identificación personal confiable.

Vucetich usó inicialmente 101 rasgos de las huellas para clasificarlas en cuatro grandes grupos.

Logró luego simplificar el método basándolo en cuatro rasgos principales: arcos, presillas internas, presillas externas y verticilos. En base a sus métodos, la policía bonaerense inició en 1891, por primera vez en el mundo, el registro dactiloscópico de las personas.

En el año 1892 hizo por primera vez la identificación de una asesina, en base a las huellas dejadas por sus dedos ensangrentados (en particular por su pulgar derecho) en la escena del crimen de sus dos hijos, en la ciudad de Necochea. La misma, de nombre Francisca Rojas, había acusado de los asesinatos a un vecino.

El método fue detalladamente presentado en sus escritos Instrucciones Generales para el sistema antropométrico e impresiones digitales, Idea de la identificación antropométrica (1894) y Dactiloscopía comparada presentado en el Segundo Congreso Médico de Buenos Aires (1904).

El último trabajo recibió premios y distinciones en todo el mundo y fue traducida a los principales idiomas. Luego de más de un siglo de su implantación —aunque han variado sustancialmente los métodos de relevamiento, archivo y comparación— la identificación de huellas dactilares todavía se basa en los cuatro rasgos finalmente elegidos por Vucetich.

Falacias en los medios de comunicación y la política


Las falacias se usan frecuentemente en artículos de opinión en los medios de comunicación y en política. Cuando un político le dice a otro «No tienes la autoridad moral para decir X», puede estar queriendo decir dos cosas:

• Usar un ejemplo de la falacia del ataque personal o falacia ad hominem, esto es, afirmar que X es falsa atacando a la persona que la afirmó, en lugar de preocuparse de la veracidad de X.

• No ocuparse de la validez de X, sino hacer un crítica moral al interlocutor (y de hecho es posible que el político esté de acuerdo con la afirmación). En este último caso, la falacia consiste en evadir el tema, dando sólo una opinión personal, no relevante, sobre la moralidad del otro.

Es difícil, por ello, distinguir falacias lógicas, ya que dependen del contexto.

Otro ejemplo, muy extendido es el recurso al Argumentum ad verecundiam o falacia de la autoridad. Un ejemplo clásico es el Ipse dixit («Él mismo lo dijo») utilizado a lo largo de la edad media para referirse a Aristóteles. Un ejemplo más moderno es el uso de famosos en anuncios: un producto que deberías comprar/usar/apoyar sólo porque tú famoso favorito lo hace.

Una referencia a una autoridad siempre es una falacia lógica, aunque puede ser un argumento racional si, por ejemplo, es una referencia a un experto en el área mencionada. En este caso, este experto debe reconocerse como tal y ambas partes deben estar de acuerdo que su testimonio es adecuado a las circunstancias. Esta forma de argumentación es común en ambientes legales.

Otra falacia muy usada en entornos políticos es el Argumentum ad populum, también llamado sofisma populista. Esta falacia es una variedad de la falacia ad verecundiam: consiste en atribuir la opinión propia a la opinión de la mayoría y deducir de ahí que si la mayoría piensa eso es que debe ser cierto. En cualquier caso muchas veces la propia premisa de que la mayoría piense eso puede ser falsa o cuando menos dudosa ya que, en muchos casos, dicha afirmación no puede ser probada más que con algún tipo de encuesta que no se ha realizado. En caso de ser cierto tampoco se justifica el razonamiento porque la mayoría piense eso. Se basa en la falsa intuición de que el pueblo tiene autoridad, tanta gente no puede estar equivocada. Se suele oír con frases del tipo todo el mundo sabe que..., o ...que es lo que la sociedad desea', así como la mayoría de los españoles sabe que....

Por definición, razonamientos que contienen falacias lógicas no son válidos, pero muchas veces pueden ser (re) formulados de modo que cumplan un modo de razonamiento válido. El desafío del interlocutor es encontrar la premisa falsa, esto es, aquella que hace que la conclusión no sea firme.



EXPERIMENTO


Por Adrián Paenza

El 12 de enero del año 2007, un joven vestido con una remera de mangas largas, jeans y usando una gorra con los colores de un equipo de béisbol de los Estados Unidos llegó a una estación de subte de la ciudad de Washington. Bajó algunos escalones y se ubicó al lado de un tacho de basura. Llevaba una caja pequeña. La abrió y sacó de ella un violín. Apoyó la caja en el piso. Tiró él mismo algunas monedas y unos pocos billetes para usarlos como 'invitación' a los transeúntes.

Sopló un poco su instrumento para sacarle el polvo y se dispuso a.... 'tocar el violín'. Era viernes, alrededor de las 8 de la mañana. La estación hervía de gente, apurada por llegar a sus trabajos. El joven ejecutó seis obras de música clásica. En total, de acuerdo con los que 'monitoreaban' la situación, en casi 43 minutos pasaron por el lugar 1097 personas. La elección de la estación no fue casual. Su ubicación podría haber sido el equivalente de nuestras Florida y Corrientes o Perú y Avenida de Mayo.

La mayoría de los pasajeros era de clase media, empleados bancarios o que trabajaban en el medio de la city. Cada uno de los transeúntes, como les habrá pasado alguna vez a usted y a mí, tuvo que tomar algunas decisiones:

* ¿me paro y escucho?

* ¿tiro algunas monedas?

* ¿camino rápido con la idea de evitar la culpa?

* ¿ignoro todo absorbido en mi propio mundo?

* ¿si la música es buena.... dejo algún dinero?

* ¿y si es mala, cambia en algo mi determinación?

* ¿me tomo algún tiempo para disfrutar de la belleza?

* ¿me muestro fastidiado, condescendiente, abrumado?

* ¿o no muestro nada?

La lista de preguntas podría seguir. Usted agregue las suyas. Mientras tanto, yo sigo. Lo que figura acá arriba es una adaptación mía de un artículo de Gene Weingarten que salió publicado el 8 de abril del año 2007 en The Washington Post.

Pero hasta acá, ¿qué tendría de 'distinto'? ¿Por qué habría de llamar tanto la atención que haya un señor tocando un violín en una estación de subte? ¿No es acaso el paisaje con el que tropezamos desde siempre o, mejor dicho, desde que se inventaron los subtes?

No. En este caso, hay una diferencia. El muchacho de jeans y remera de manga larga era Joshua Bell. Quizás a usted ese nombre no le diga nada. En todo caso, si le importa, a mí tampoco me decía nada (lo cual demuestra cuán alejados estamos, usted y yo, de tener cultura musical). Pero Bell era, ya en ese momento -hace tres años-, uno de los mejores violinistas del mundo.

No sólo eso: las seis piezas que eligió son de las más difíciles de ejecutar aun para los más expertos. Como dice Weingarten, el autor del artículo que salió en el diario norteamericano, 'muchos lo intentaron, pero sin éxito'. Aún hay más: el violín que usó Bell fue un Stradivarius cuyo valor está estimado en tres millones y medio de dólares.

Sí, como leyó: tres millones y medio de dólares. Aquí me veo ya en la obligación de invitarlo a participar de EL experimento. La idea surgió en la redacción del Washington Post. Consistía en testear la reacción de la gente frente a algo descomunalmente bello, pero 'fuera de contexto', para tratar de entender la percepción y prioridades que tenemos.

Es decir, ¿puede uno decir que frente a una situación de ese tipo reaccionaría deteniéndose y valorando lo que se le ofrece gratuitamente? Joshua Bell nació en Bloomington, Indiana. Fue en diciembre de 1967. Y desde muy niño -como suele suceder en estos casos- se destacó como alguien diferente.... al menos para tocar al violín. Pero el experimento del Washington Post los trasciende a todos: a Bell, a Stradivarius, a Bach y a todos los humanos involucrados en la puesta en escena.

En todo caso, nos expone tal como somos. Bell no eligió música conocida que fuera atrapante por lo conocida. Venía de tocar en Boston, llenando el equivalente de nuestro Teatro Colón, con entradas que costaban por lo menos 100 dólares. Es decir, el público que por allí pasó, esas más de mil personas, tuvo oportunidad de escuchar la mejor música del género, ejecutada por uno de los mejores exponentes humanos para hacerlo y con uno de los instrumentos más valiosos que existen sobre la Tierra.

Usted ¿qué cree que pasó? ¿Qué supone que hizo esa muestra de la sociedad que salía de esa estación? Eran personas como usted o como yo. ¿Se podrá extrapolar y pensar que lo que sucedió allí es lo que pasaría en cualquier estación de subte del mundo? ¿Qué hubiera hecho usted? No me lo diga a mí (igualmente no podría escucharlo), pero piénselo con franqueza y fíjese en cómo reaccionó cada vez que se enfrentó con una situación de ese tipo (alguien tocando el violín o algún instrumento en una estación de tren o de subte).

Cuando a Bell le ofrecieron hacer el experimento, le dijeron que la idea era evaluar si, fuera de contexto, la gente común sería capaz de reconocer a un genio. Bell no dudó en aceptar, pero puso una sola condición: no quería que apareciera esa palabra, genio. Y en realidad, si uno lo piensa, es ciertamente irrelevante. Pero no me quiero escapar de los datos que se obtuvieron. En los casi tres cuartos de hora que duró el experimento, solamente siete personas se detuvieron para escucharlo al menos durante ¡un minuto!

Veintisiete depositaron algún dinero, la mayoría apurada y sin parar y en total, al finalizar su actuación, había recolectado 32 dólares. Eso resume lo que hicieron durante ese lapso las 1097 personas que circularon por el lugar. O puesto de otra manera, 1070 de ellas no tuvieron tiempo para apreciar la belleza de lo que tenían por delante. Obviamente, yo no voy a ser quien saque las conclusiones. No sólo porque no estoy en condiciones, sino porque no sabría qué conclusiones sacar. Pero sí tengo preguntas.

Este experimento, ¿dice algo sobre cómo somos? ¿Se puede inferir algo de él? ¿Hubiera pasado algo distinto si en lugar de haber sido en Washington hubiese sido en Buenos Aires o París? ¿Necesitamos que alguien nos tutele, nos diga 'esto es lindo', 'esto es excepcional', etc., para poder apreciarlo? ¿Cuánto de lo que opinamos es porque estamos 'hablados' desde afuera, influenciados por lo que piensan otros? ¿Tiene que ver con que haya sido algo referido a la música, y muy en particular la música clásica? ¿Entrará en juego que la gente que pasaba por allí iba apurada a su trabajo y tenía citas a las que no podía llegar tarde?

Pero, si ésa fuera la explicación, ¿se hubieran detenido si quien estaba en el lugar de Bell hubiera sido Messi, haciendo jueguito con una pelota, o Ginóbili tirando al aro? ¿De qué depende? ¿De la popularidad? ¿De la fama? ¿Y cuánto hay de la oportunidad que se nos da a los humanos para distinguir lo que es bueno de lo que no? ¿Tiene acaso que ver con el poder adquisitivo? ¿Con la 'cultura' adquirida? ¿Y la valoración de 'lo bello' por encima de haber concurrido a cualquier escuela?

Quiero terminar acá, pero con una invitación: no se quede con nada de lo que yo escribí.... siga pensando por su cuenta. ¿Qué hubiera hecho usted? O si eso no le resulta interesante, quizá le parezca valioso aprender a entender un poco más 'cómo somos...' si es que 'somos' algo tan uniforme. Su turno.

Gentileza, Marian Benedit



¿Es verdad que los políticos ven y los estadistas prevén?


¿Es verdad que los políticos piensan en la próxima elección y los estadistas en la próxima generación?

Benjamín Disraeli expresó: “El mundo está harto de estadistas a quienes la democracia ha degradado convirtiéndolos en políticos”.

Es bueno analizar estos comentarios, ya que ingresamos a un año en el que será oportuno demostrar que la política es el arte de gobernar a los pueblos, apostolado rector que debe imperar por sobre las ambiciones de los hombres que suelen hacer de la política un objetivo personal y no un objetivo nacional.

Hay hechos en la historia que deberían tomarse de ejemplo. Un grupo político ofreció apoyar las pretensiones de Abraham Lincoln en determinado asunto -el traslado del Parlamento de Vandalia a Springfield-, si a su vez Lincoln apoyaba a ese grupo en otro asunto que a dicho grupo interesaba. Lincoln les respondió así: “Nadie me inducirá a votar una cosa que considero falsa, para poder conseguir con ese voto algo que considero justo”. Lección ejemplar que no en vano quiero destacar.

El pueblo argentino sabe -saberlo le costó mucho en desilusión y sufrimiento- que los débiles se apasionan por los hombres; los fuertes se apasionan por las ideas.

Lo más significativo para quien esto escribe, en ese arquetipo del héroe español que es Don Quijote, es que ante todo, sabe renunciar a sí mismo. Es decir, sabe dejar de ser para comenzar a ser de nuevo. Vive asomándose al ideal de la justicia que él añora. Se resiste a aceptar la soberanía de un mundo rígido e incoloro, inflexible, para establecer con su lanza y su adarga, el imperio de la soberanía del ideal, ya que con su acatamiento, el pueblo no cede jirones de su propia soberanía.

Héroe lúcido y vibrante, Don Quijote, en su lucha contra la sociedad, en la que no encuentra lo que busca, no se preocupa que su esfuerzo se vea o no coronado por el éxito. Sabe que a veces es más dulce luchar por ese fruto sin alcanzarlo, que poder comerlo recibiendo en la boca en vez de la miel de la esperanza, la acidez del desengaño.

A más de cuatro siglos del nacimiento de Cervantes hagamos cabalgar en nuestra alma el símbolo de Don Quijote. El ingenioso Hidalgo vio más hondo y más claro en su cordura, que los locos prácticos devoradores de sus migajas.

Por eso he creído oportuno y de gran beneficio colectivo transcribir los consejos que Don Quijote dio a Sancho Panza antes de que fuese designado gobernador de la Insula Barataria. Nuestros políticos deberían leerlos como una cartilla de principios insoslayables. Y comprobaremos que de lo mucho que Cervantes escribió en 1605, una porción no pequeña de lozanía, encontramos en su mensaje.

Dice Don Quijote a Sancho: “Primeramente ¡oh hijo!, haz de temer a Dios; porque en temerle está la sabiduría; y siendo sabio no podrás errar en nada”.

“Lo segundo, haz de poner los ojos en quién eres, procurando conocerte a ti mismo, que es el más difícil conocimiento que puede imaginarse. Del conocerte saldrá el no hincharte, como la rana que quiso igualarse con el buey”.

“Haz gala de la humildad de tu linaje, y no te desprecies de decir que vienes de labradores; porque viendo que no te corres ninguno se pondrá a correrte; y préciate más de ser humilde virtuoso que pecador soberbio”.

“Si tomas por medio a la virtud y te precias de hacer hechos virtuosos, no hay por qué tener envidia a los príncipes y señores; porque la sangre se hereda y la virtud se conquista. Y la virtud vale por sí sola lo que la sangre no vale”.

“Hallen en ti más compasión las lágrimas del pobre, pero no más justicia que las informaciones del rico”.

“Cuando pudiere y debiere tener lugar la equidad, no cargues todo el rigor de la ley al delincuente; que no es mejor la fama del juez riguroso que la del compasivo”.

“Si acaso doblares la vara de la justicia, no sea con el peso de la dádiva, sino con el de la misericordia”.

“Cuando te sucediere juzgar un pleito de algún enemigo, aparta las mientes de tu injuria, y ponlas en la verdad del caso”.

“No te ciegue la pasión propia en la causa ajena; que los yerros que en ella hicieres, la más de las veces serán sin remedio; y si los tuvieran será a costa de tu crédito y aún de tu hacienda”.

“Esto que hasta aquí te he dicho, son documentos que han de adornar tu alma. Palabras para recordar, mensajes para cumplir; postulados para abrazar, consignas para vivir”.

Con el concepto claro de lo que somos y de lo que debemos ser, abramos los brazos de la gran tarea argentina que sólo puede lograrse si todos actuamos hermanados, ya sea en la coincidencia o en la divergencia, pero todos juntos en la gran rebelión contra la incertidumbre y la injusticia, todos juntos en la divina tarea de construir un país sereno y dueño de su destino, fuerte y grande.

Decía J. Maragall: “Descartemos la solución providencial, la de un hombre que surge y lo arregla todo: esta solución cabe esperarla siempre, a condición de no contar nunca con ella”.

Y entonces sí, al bregar por una Argentina sin máculas, sin extravíos, movilizada en la conciencia de sus hijos, de frente a la responsabilidad de un destino, estará muy cerca de ser alcanzado para loor y gloria de nuestra nación.

Es decir, arriar definitivamente el odio, el deshonor y la calumnia; ver en el otro la continuidad de uno mismo; saber que el sueño mayor debe estar en el “ser más”, no en el “tener más”; sentir y exhibir el amor como emblema de paz entre los hombres y vivir en el convencimiento que no somos eternos, sino leves transeúntes de una vida que hay que honrarla con la humildad, que es lo único que construye entre los hombres.

Finalmente, aspiro ver en los políticos argentinos con fervor y claridad en su alma y orgullo y jerarquía, practicar “el culto de la más fermosa” en quienes aún embisten molinos, buscando la ruta del Toboso en su vida y en su alma, en los que siguen viendo aún, en las tinieblas, “brillar el sol sobre las barbas”, recorriendo como Don Quijote el alma por las paramedas encendidas de sol, abordando con coraje, idealismo y dignidad la maravillosa aventura de honrar la vida.

"Por la libertad es lo único que el hombre puede entregar su vida".
Miguel de Cervantes Saavedra

Por Jack Benoliel





El Ego y sus roles

EL EGO Y EL ESPÍRITU

A la inmensa mayoría de las personas no les (nos) interesa "lo que es", sino "cómo se ven" o, qué calidad de imagen proyecta. Les interesa la imagen más que la objetividad. Y así, el hombre de la sociedad se lanza a participar en esa carrera de las apariencias, en el típico afán de 'quién engaña a quién', de cómo lograr mejor impresión. El mundo es un inmenso estadio en el que "el orgullo de la vida" juega un gran match de las etiquetas, formas sociales y exhibiciones económicas para competir por la imagen social, un combate en el que a los seres humanos no les interesa ser, sino parecer.

EL ESPÍRITU Y EL SER

El Espíritu siempre ha sido esquivo. Hemos sido esquivos (as) al Espíritu: "eso son cosas de locos", dicen los materialistas. El Ser - o Espíritu -, nos sostiene a todos, es nuestra fuente de aliento y vida y, sin embargo, es algo sobre lo cual nuestros padres nos enseñaron muy poco. Juan nos dice: "Ya estaba en el mundo, este mundo que no lo reconoció. Vino a su propia casa y los suyos no lo recibieron".

Una antigua escritura de la India nos dice sobre el Espíritu, lo siguiente: " Un cuchillo no Lo puede cortar, el agua no Lo puede mojar, el Viento no Lo puede alejar, el sol no Lo puede secar".

Cada molécula del universo esta llena de Ser; cada pensamiento, cada trozo de información que nos llega a través de los cinco sentidos no es otra cosa que Ser. Pero podemos pasar por alto al Ser porque este mantiene un silencio total, como un maestro coreógrafo que nunca participa en la danza. En verdad, El siempre existió y existirá. Sólo necesitamos apertura para estar "en espíritu" o, inspirados.

EL EGO Y EL YO

Así como hay dos polos en un imán, uno positivo y uno negativo; las personas también cargamos con dos personajes en disputa; uno de ellos es el que se afana por el éxito material y el otro que aspira a elevarse espiritualmente. La descripción brindada por Sogyal Rinpoche en la obra "El libro tibetano del vivir y del morir" explica a las mil maravillas este descubrimiento: "Dos personas han estado viviendo en ti durante toda tu existencia. Una es el ego: charlatana, exigente, histérica, calculadora; la otra es el ser espiritual oculto, cuya queda y sabia voz has oído y atendido sólo en raras ocasiones".

EL EGO O LA MÁSCARA SOCIAL

La pequeña palabra "ego" ha tenido varios significados. Para la escuela freudiana es "el aspecto consciente de la psique que decide entre los instintos básicos del ello y la moralidad del superyó":

Definición muy académica. El estereotipo de este modelo suele ser varón. La persona con "problema de ego" se considera que es jactanciosa, egoísta, desdeñosa, vanidosa y, por lo general, desagradable, o también, la persona dedicada al odio, la malicia y la destrucción. También se ha considerado al ego como algo que está dentro de nosotros, controlando nuestra vida cotidiana, presionándonos para que mostremos una "buena imagen".

Atención: Se puede ser altruista y bondadoso para mostrarse ante los demás... y eso también es ego.

Para los fines que nos proponemos, sugerimos otra definición del "ego": "Consideremos al ego como la idea que cada uno de nosotros tiene de sí mismo. Es decir, que el ego no constituye mas que una idea, una ilusión, pero una ilusión que ejerce gran influencia". Nadie ha visto al ego. Se trata más bien de un fantasma que aceptamos que controle nuestra vida. El problema es que mantener esta ilusión puede impedirle conocer su verdadero yo, su esencia espiritual.

Opinamos que el ego es una disposición del pensamiento errónea que intenta presentarle como a usted le gustaría ser, en lugar de cómo es en realidad.

En esencia, el ego, la idea de uno mismo, la máscara, el papel que estamos desempeñando; supone una forma distorsionada de afirmar y vivir la existencia. A esta máscara social (el ego) le gusta la aprobación, quiere controlar situaciones y personas, y se apoya en el poder porque vive en el temor.

SUGERENCIAS PARA SUPERAR EL EGO Y ALCANZAR LA CONCIENCIA SUPERIOR

Las siguientes sugerencias le ayudarán a ponerse en contacto con el ego y superarlo:

* Intente conocer su ego y determinar cuando su ego influye y domina su vida. Pregúntese: ¿Estoy escuchando a mi falso yo o a mi yo espiritual?.

A medida que vaya adquiriendo conciencia de su ego, podrá librarse del egocentrismo y entrar en la conciencia superior.

* Comience a llevar la cuenta de con cuánta frecuencia usa el pronombre "yo". Al no centrarse en su propia persona estará superando el ego.

* Comience a considerar su ego como una entidad que le acompaña y que tiene un propósito. Es invisible y siempre está a su lado.

Trata de convencerlo de que usted está separado de Dios, de su superioridad respecto de otros, y de que es "especial". El quiere que usted se sienta ultrajado cuando recibe un trato incorrecto, cuando lo insultan, cuando no lo acarician; ofendido cuando no sale con la tuya, herido cuando pierde en una competición. Primero conoce a esta entidad. Luego se percata de que está obrando en usted. Por último, se libre de ella.

* Escuche a los demás y no se centre en sí mismo. Durante las conversaciones, concéntrese en lo que la otra persona está diciendo y en lo que siente. Luego responda con una frase que empiece por "tú, usted". Esto se denomina escucha activa. Es una manera de contener el ego y permitir que participe el yo espiritual.

* Resista el hábito de permitir que el ego domine su vida.

Cuanto más se resista a permitir que su ego sea quien controle su vida, más pronto llenará el espacio que antes ocupaban las exigencias de su falso yo.

* Practique la meditación diaria o el acallar su mente para deshacer la ilusión de que está separado del universo y que todas las almas son extensiones de la energía de Dios. Comenzará a tratar a los demás como le agradaría que lo tratasen a usted. Se sentirá conectado con todo y con todos.

* Trate de borrar de su mente la palabra "especial". Especial implica mejor que, o más importante que. Niega que Dios habita en cada uno de nosotros. Todos somos especiales a los ojos de Dios: por lo tanto, nadie necesita la etiqueta de "especial". No hay favoritos. No se relega a nadie.

Todos somos Uno.

* Escriba un diario. Trate de describir en que le beneficia sentirse ofendido. Lo que lo ofende es obra de su ego. No pretenda que el mundo debería ser como usted es y no como en realidad es.

* Dé más de sí mismo y pida menos a cambio. León Tolstoy, pasó de ser un egocéntrico a ser un servidor de Dios, luego de aprender muchas lecciones y pasar por tribulaciones. Y escribió lo siguiente: "El único significado de la vía es servir a la humanidad". Sea quien acaricie. Sea quien da cariño.

* Recuérdese cada día que el más alto culto que puede rendírsele a Dios es servir a la humanidad, y que mediante ese acto su yo espiritual se sentirá realizado.

* Ponga fin a la búsqueda externa de la libertad y conozca el sabor de la auténtica libertad que es la comunión con su yo espiritual.

La auténtica libertad no necesita nada para demostrar su existencia. Sólo siendo auténticamente libre podrá amar, porque no existe amor sin libertad. La falsa libertad exige que tenga a la mano algo que dé fe de su existencia.

Nota recopilada por el Prof. Jorge Olguín.



EGO Y PODER

SIGNIFICADO DE "EGO"

Según Freud, es el "principio de realidad", es consciente y tiene la función de la comprobación de la realidad, así como la regulación y control de los deseos e impulsos provenientes del Ello.

Su tarea es la autoconservación y utiliza todos los mecanismos psicológicos de defensa.

El pequeño yo, posesivo y limitado, que debe ser destruido en la medida que consista de ilusiones, mientras que la mayoría tiende a considerarlo o tratarlo como algo permanente, estable, algo a lo cual uno puede referirse análogo a una silla o una mesa.

SIGNIFICADO DE PODER

Por poder pueden entenderse múltiples conceptos de acuerdo a cada campo. A un nivel básico, poder suele identificarse con la noción de fuerza ...

Gran parte del debate sociológico reciente sobre el "poder" gira sobre el problema de definir su naturaleza como constrictiva o como permisiva. ...

Autorización en virtud de la cual una persona ejerce en nombre de otra los actos jurídicos que ésta le encargue la habilidad para castigar o recompensar sin autoridad.

Capacidad de afectar al comportamiento de otras personas, con o sin su consentimiento.

Cuando cualquier proceso, ente o fenómeno orienta su ciclo informativo y gnoseológico con la toma de decisiones dirigidas hacia un objetivo con el fin de producir un resultado. (Caracas, Venezuela. Instituto de Investigaciones Integradas. Dr. Luis Gómez de la Vega y Dr. Juan F. Manzanares).

Tener poder significa tener recursos, pero éstos tienen valor para satisfacer necesidades. Necesita la existencia mínima de dos personas. Existen distintos tipos:

Documento que le confiere a una persona la autoridad para actuar por cuenta de otra.

Suprema obsesión de la Casa Blanca y el Pentágono por demostrar al mundo que los que mandan son ellos..

Es la capacidad de un individuo o persona de persuadir, convencer, manejar y dirigir una o varias personas para que cumplan una función específica, o tarea asignada.

Probabilidad de imponer la propia voluntad dentro de una relación social.

Lewin lo define como la habilidad potencial de una persona para lograr que otra se conduzca de un cierto modo capacidad de imponer a otros la propia voluntad.

Hacer lo que uno quiere.

Base del status político.

LOS CARGOS SUELEN OTORGAR PODERES Y ACARICIAR LOS EGOS MANTENERLOS PARA SATISFACER EL PROPIO A VECES IMPLICA LA NECESIDAD DE ACARICIAR LOS AJENOS.

DEJAR ESPACIOS DE PODER ES PÀRECIDO A SENTIRSE MONJE Y CARECER DE HABITOS.

EL REFRAN ENSEÑA QUE EL HABITO NO HACE AL MONJE PERO HAY QUE LLEVARSE
DEMASIADO BIEN CON UNO MISMO PARA NO SENTIR QUE LO NECESITAMOS NO HAY QUE SUBESTIMAR A LA GENTE "COMUN"

LA POLITICA Y EL PODER CONSUME PERSONAS, FUNCIONARIOS, EMPLEADOS, ETC.

20 REGLAS PARA EL JUEGO DEL PODER


Las Autoridades de todo tipo avisan que este tipo de juegos pueden ser perjudiciales para su propio poder.

Le guste o no le guste, todas las relaciones humanas se basan en un juego de poder. Cuanto mejor lo domine, más feliz será, y por lo tanto, más feliz podrá hacer a los demás. Si juega mal o se niega a jugar, en el mejor de los casos, su vida discurrirá con menos suavidad.

Aquí se expondrán unas reglas que generalmente conviene seguir. Son un resumen de textos de varios autores clásicos con algunos comentarios.

Quizás alguien se escandalice con algunas de las ideas que aquí se exponen, choquen con sus creencias o parezcan poco éticas.

Aunque ahora se hable de unos valores como solidaridad, tolerancia, etc., desgraciadamente, la vida viene siendo un juego de poder desde hace milenios y no parece que vaya a cambiar. De todas formas, usted elige bando: tener poder o no tenerlo.

Espero que disfruten con esta lectura y que a partir de ahora jueguen con ventaja ...

REGLAS DEL JUEGO

"A los hombre se les debe gobernar con guante de acero dentro de guante de terciopelo".
Napoleón Bonaparte.

1/ Ser misterioso e impredecible.

"Cualquiera que tenga forma puede ser definido, y cualquiera que pueda ser definido puede ser vencido". Sun Bin (Arte de la Guerra II)

"No obrar siempre igual. Así se confunde a los demás, especialmente si son competidores. No hay que obrar siempre de primera intención, pues nos captarán la rutina y se anticiparán y frustrarán las acciones. Tampoco hay que actuar siempre de segunda intención, pues entenderán la treta cuando se repita". El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

"Sé extremadamente sutil, discreto, hasta el punto de no tener forma. Sé completamente misterioso y confidencial, hasta el punto de ser silencioso. De esta manera podrás dirigir el destino de tus adversarios". Sobre lo lleno y lo vacío en El Arte de la Guerra (Sun Tzu)

"Hay que ingeniárselas, por encima de todo, para que cada una de nuestras acciones nos proporcionen fama de hombres grandes y de ingenio excelente". El Príncipe (Maquiavelo)

"Si el soberano no es misterioso, los ministros encontrarán la oportunidad de tomar y tomar." Huanchu Daoren

2/ Hacer que nadie sepa lo que piensas.

"Que el enemigo nunca sepa lo que piensas". Mario Puzo en El Padrino

"Confundir a los contrincantes significa actuar de tal manera que les impida mantener la mente en calma. Intenta varias maniobras según la oportunidad del momento, haciendo pensar al contrincante que ahora vas a hacer esto, después lo otro, y a continuación algo distinto, hasta que veas que empieza a estar desconcertado, y así ganar a voluntad". El Libro de los Cinco Anillos (Miyamoto Musashi)

"Todo el mundo conoce la forma mediante la que resulto vencedor, pero nadie conoce la forma mediante la que aseguro la victoria". El Arte de la Guerra (Sun Tzu)

3/ Hablar menos de lo que se debería.

"Alá dió al hombre dos oidos y una boca para hablar la mitad de lo que se escucha". Provebio árabe

" Nunca se debe empezar a hablar antes de que lo hagan los subordinados. Cuanto mas tiempo se permanezca callado, más pronto empezarán los demás a hablar. Y mientras lo hacen, uno puede comprender sus verdaderas intenciones." Huanchu Daoren

4/ Cuando hay que dejar elegir a alguien, que sólo elija entre lo que usted quiera.

Es el ejemplo de técnica de venta en el que decimos: "Perfume Brisa Marina o perfume Sol y Arena, usted elige" y, naturalmente, los dos perfumes son de la misma empresa. Elijan lo que elijan, siempre ganamos.

"Las heridas y cualquier otro mal que los hombres se ocasionan a sí mismos espontáneamente y por su propia elección son a largo plazo menos dolorosas que aquellas que les ocasionan los otros." Maquiavelo

5/ Que otros hagan las cosas por usted.

"Es una gran suerte de los poderosos acompañarse de hombres de gran entendimiento que les saquen de todos los problemas causados por la ignorancia y que incluso peleen por ellos las luchas más difíciles. El que no pudiera alcanzar a tener la sabiduría en servidumbre, que la alcance en la amistad". El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

6/ Que su jefe no sepa ni sospeche que usted es mas listo que él.

"Toda derrota es odiosa, y si es sobre el jefe o es necia o es fatal. Siempre fue odiada la superioridad, y más por los superiores. Será fácil hallar quien quiera ceder en éxito y en carácter, pero no en inteligencia, y mucho menos un superior. A los jefes les gusta ser ayudados, pero no excedidos". El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

7/ Hacer que la gente dependa de usted.

"Un príncipe sabio ideará la forma para mantener a todos los ciudadanos en todas las circunstancias en situación de dependencia del Estado y de él; y entonces ellos siempre confiarán." Maquiavelo

"Hacerse indispensable. Más se saca de la dependencia que de la cortesía; el satisfecho vuelve inmediatamente la espalda a la fuente. La primera lección de la experiencia debe ser entretenerla, pero no satisfacerla; así se conserva la dependencia que los demás tienen; incluso la del Rey." El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

8/ Confiar en el interés del prójimo, no en su agradecimiento.

"La forma mejor y más rápida de hacer fortuna es dejar que los demás vean claramente que está en su propio interés promocionar el tuyo" Jean de la Bruyère.

Si se va a pedir ayuda a alguien, no hay que recordar los favores del pasado, encontrarán las formas de ignorarlo. Hay que encontrar algo en la petición que le pueda beneficiar y exagerarlo. Entonces, la otra parte responderá con entusiasmo, ya que también podrá sacar provecho.

9/ La información es el poder: espíe.

"Los espías nativos se contratan entre los habitantes de una localidad. Los espías internos se contratan entre los funcionarios enemigos. Los agentes dobles se contratan entre los espías enemigos. Los espías liquidables transmiten falsos datos a los espías enemigos. Los espías flotantes vuelven para traer sus informes.

Entre los funcionarios del régimen enemigo, se hallan aquéllos con los que se puede establecer contacto y a los que se puede sobornar para averiguar la situación de su país y descubrir cualquier plan que se trame contra ti, también pueden ser utilizados para crear desavenencias y desarmonía". Sobre la concordia y la discordia en El Arte de la Guerra (Sun Tzu)

10/ Destruya totalmente a sus enemigos.

Cuando Roma venció definitivamente a los cartagineses, un senador dijo: "En mi opinión, Cartago debe ser destruida". Todos sus habitantes fueron esclavizados y la ciudad fue totalmente arrasada y sembrada con sal. Nunca más volvieron a molestar a Roma.

"A los hombres se les ha de mimar o aplastar, pues se vengan de las ofensas ligeras ya que de las graves no puede: la afrenta que se hace a un hombre debe ser, por tanto, tal que no haya ocasión de temer su venganza". El Príncipe (Maquiavelo)

" Aplastar " exige un estado de ánimo de aniquilamiento, como cuando ves débil a un adversario y te creces entonces para vencerle.

Si tú " aplastamiento " es débil, puede volverse contra ti. Tienes que sabe distinguir cuidadosamente cuando estás en pleno control de ti mismo en el momento de atacar para aplastar.

También en el arte individual de la guerra, cuando tú contrincante no está tan entrenado como tú, o cuando su ritmo disminuye, o cuando empieza a retroceder, es esencial no dejarle que tome aliento, ni concederle siquiera el tiempo de pestañear: abátele inmediatamente. Lo más importante es no dejarle recuperarse". El Libro de los Cinco Anillos de Miyamoto Musashi

11/ No discutir, actuar.

"Pensar y actuar son la misma cosa". Proverbio Zen. Bushido

"Nunca se debe discutir. En sociedad no se debe discutir nada, sólo hay que ofrecer resultados." Benjamín Disraeli

Cualquier victoria en una discusión creará resentimiento duradero y será peligroso a la larga. Es mejor que los demás cambien de opinión a través de las acciones: hay que demostrar, no explicar.

Cuando se acaba una discusión, todas las partes están más convencidas de sus ideas. En realidad, no vale para nada discutir, salvo para enmascarar otras tretas.

12/ Elija sus enemigos y muévalos a su antojo.

Si utilizas al enemigo para derrotar al enemigo, serás poderoso en cualquier lugar a donde vayas". Sobre la iniciación de las acciones en El Arte de la Guerra (Sun Tzu)

"Hay muchas gentes que estiman que un príncipe sabio debe, cuando tenga la oportunidad, fomentarse con astucia alguna oposición a fin de que una vez vencida brille a mayor altura su grandeza". El Príncipe (Maquiavelo)

" Un jefe que conoce a los soldados " es un método practicado siempre en tiempos de conflicto, tras haber alcanzado la maestría a la que uno aspira: habiendo logrado el poder del conocimiento del arte de la guerra, piensa en los adversarios como en tus propios soldados, sabiendo que puedes ordenarles lo que desees y manejarles con libertad. Tú eres el jefe, los adversarios son las tropas. Esto requiere práctica". El Libro de los Cinco Anillos (Miyamoto Musashi)

"Los buenos guerreros hacen que los adversarios vengan a ellos, y de ningún modo se dejan atraer fuera de su fortaleza.

Si haces que los adversarios vengan a ti para combatir, su fuerza estará siempre vacía. Si no sales a combatir, tu fuerza estará siempre llena. Este es el arte de vaciar a los demás y de llenarte a ti mismo.

Lo que impulsa a los adversarios a venir hacia ti por propia decisión es la perspectiva de ganar. Lo que desanima a los adversarios de ir hacia ti es la probabilidad de sufrir daños." Sobre lo lleno y lo vacío en El Arte de la Guerra (Sun Tzu)

"Al hombre sabio le son más útiles sus enemigos que al necio sus amigos. Una malevolencia suele allanar montañas de dificultad que la benevolencia no se atrevería a pisar. A muchos sus enemigos les fabricaron su grandeza. Es más fiera la lisonja que el odio, pues éste señala defectos que se pueden corregir, pero aquélla los disimula. La cautela es grande cuando se vive junto a la emulación, a la malevolencia". El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

13/ La retirada no es la rendición.

Una retirada a tiempo vale más que mil victorias" Napoleón

"Si puedes ganar la batalla, lucha; si no, retírate". Mao Tse Tung (estrategia y táctica)

Estrategia 36: De las 36 estrategias, la definitiva es la última: retirarse. Retirarse cuando todo falla es la estrategia definitiva. Pero no significa huir definitivamente. Al enfrentarnos con un enemigo infinitamente superior, se puede rendir, negociar o retirarse. La retirada no significa la derrota total, el compromiso significa una media derrota y la rendición, la derrota total.

Para Sun Tzu representa someterse temporalmente al poderoso, en espera de una transición a una nueva fase. En la Segunda Guerra Mundial, los soviéticos se retiraron hasta Moscú, dejando todo arrasado. Aliados con el general invierno, cuando pararon ahí a los alemanes, la contraofensiva les dejó en Berlín.

Hay que recordar que fracasar es fácil, pero hacerlo con gracia y éxito puede ser más difícil que el mismo éxito. Además, se aprende mas de los fracasos que de los aciertos.

Como recomendación final, la retirada nunca debe hacerse sin pensar, de forma impulsiva.

No hay que considerar que retirarse es una manera de escapar a los desafíos, si no una manera de enfrentarse mejor a ellos.

14/ Concentrar los esfuerzos. Buscar puntos débiles.

"Encontrar el punto débil de cada uno: este es el arte de mover las voluntades. Es más una destreza que determinación. Es saber por dónde se ha de entrar a cada uno. Primero hay que conocer el carácter, después tocar el punto débil, insistir en él, pues infaliblemente se quedará sin voluntad". El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

15/ Que otro haga el trabajo sucio.

Los príncipe debe ejecutar a través de otros las medidas que puedan acarrearle odio y ejecutar por sí mismo aquellas que le reportan el favor de los súbditos. Debe estimar a los nobles, pero no hacerse odiar del pueblo. El Príncipe (Maquiavelo)

Estrategia nº 3: "Matar con un cuchillo prestado" Significa utilizar los recursos ajenos en provecho propio. En vísperas de la invasión de la Unión Soviética, los servicios de inteligencia alemanes proporcionaron a los soviéticos pruebas inventadas de que el mariscal ruso Mijail Tujachevski conspiraba contra Stalin.

Como consecuencia, los mismos soviéticos ejecutaron a Tujachevski y a otros siete mariscales que Alemania consideraba obstáculos esenciales para la inmediata invasión. 36 estrategias chinas

16/ Decir a los demás lo que quieren oír.

"Ningún hombre tiene que desesperarse pensando que no obtendrá conversos para la causa más extravagante si tiene el arte de suficiente para representarla con colores favorables." David Hume.

"La verdad es fría, no resulta cómoda. Una mentira es más hermosa. Es mucho más interesante y provechoso fantasear que decir la verdad." Joseph Weil, estafador.

17/ Una vez que se decide, actuar sin vacilar.

Si no tenemos claro que línea de acción tomar, mejor no empezar. Las dudas y vacilaciones lo estropearán. Todos admiran al audaz, nadie al tímido.

"Camina o siéntate, pero no dudes." Proverbio Zen

"Creo que es mejor ser impetuoso que prudente, porque la fortuna es mujer, y se si desea dominarla, se puede ver que se deja conquistar por el audaz más que por aquellos que actúan fríamente." El Príncipe (Maquiavelo)

18/ Atacar a las emociones del contrario, buscar el desequilibrio.

Eliminar el corazón: Cuando luchas con un enemigo y parece que estás ganando por tu habilidad en esta ciencia, el adversario quizás todavía mantenga la esperanza y, aunque aparentemente derrotado, se niegue a reconocer internamente la derrota. “Eliminar el corazón " se aplica en estos casos.

Esto significa cambiar repentinamente de actitud, para hacer que el enemigo vez de mantener esa idea; lo principal en este caso es observar cómo se siente derrotado desde el fondo de su corazón.

Puedes " eliminar el corazón " (La Esperanza) de la gente con armas, con tu cuerpo, o con tu mente. Esto no ha de entenderse de una sola manera.

Cuando tus enemigos han perdido completamente el corazón (la esperanza), ya no tienes que prestarles atención nunca más. En otro caso, mantente alerta. Si los enemigos conservan aún sus ambiciones, difícilmente sucumbirán. El Libro de los Cinco Anillos (Miyamoto Musashi)

19/ Concentrar esfuerzos.

"La mejor estrategia es ser siempre muy fuerte, sobre todo en el momento decisivo. No hay ley estratégica superior que mantener las fuerzas concentradas. Hay que actuar con la máxima concentración." Karl Von Clausewitz.

"Se debe apreciar la intensidad más que la extensión. La perfección reside en la calidad, no en la cantidad. La extensión por sí sola nunca se eleva por encima de la mediocridad, y es la desgracia de los hombres con amplios intereses generales que mientras les gustaría tener un dedo en todas las tartas, no lo tienen en ninguna." Baltasar Gracián

20/ Una vez que se ha ganado, hay que saber parar.

"Conocer cuando las cosas están en su punto, en su sazón, y saberlos disfrutar. Todas las obras de la naturaleza llegan al colmo de su perfección: hasta allí fueron ganando, desde allí irán perdiendo". El Arte de la Prudencia (Baltasar Gracián)

Hay mas reglas, pero en aplicación de la regla número tres, por ahora no les voy a contar todo lo que sé.

Aunque a lo mejor voy añadiendo alguna regla o comentario nuevos, ya veremos. Otra vez será... si siguen visitando esta página que se irá ampliando con artículos que Vds. pueden remitir.

Sólo me permito recomendar que observen a las personas que juegan bien a este fascinante juego y a lo mejor deducen Vds. mas reglas.

Piensen en el cortesano del Rey Sol en Versalles o en el mismo Rey, en el mandarín y las concubinas del Emperador de China, en un Cardenal florentino del Renacimiento o en los eunucos de los harenes de los sultanes, quizás le inspiren por cómo manejaban el poder.

Los árboles retorcidos sobreviven al hacha del leñador, no así los árboles rectos. Proverbio hindú.

Y un último consejo: paciencia y autocontrol son las virtudes que debe tener todo buen jugador.

lunes, 24 de enero de 2011

“NO ENTENDER NI JOTA”


La jota fue por mucho tiempo la Cenicienta de las letras.

Y continúa siendo, a veces, el equivalente de lo ínfimo.

Ya el Evangelio registra esa condición: “Hasta que perezcan el Cielo y la Tierra”, se asegura allí, “ni una jota ni un ápice serán quitados de la ley…”.

El texto alude a la yod , la más pequeña del alfabeto hebreo.

Apenas un palito, que los romanos hicieron crecer: para que sonara como consonante le agregaban una colita que con el tiempo se convirtió en el “rulo” inferior que hoy lleva.

Se tardó siglos en reconocerle un lugar en el abecedario español, tanto que durante una larga época se lo recitaba pasando directamente de la i a la k.

Hoy la jota figura a la par de las demás.

Pero el dicho subsiste, para dar a entender que no entendemos nada.

Exilio



¿Ya no me amas? ¡Bien! Partiré desterrado

de mi primer amor a otro amor que imagino...

Adiós carne amorosa, rapazuelo divino

de mis sueños, ¡adiós bello cuerpo adorado!

En ti, como en un valle, me adormecí embriagado

en un sueño de amores a mitad del camino;

quiero darte ya mi último beso peregrino

como quien abandona la patria, desterrado.

¡Adiós, cuerpo fragante, patria de mi embeleso,

nido de blandas plumas de mi primer idilio,

jardín, en que hecho flores, brotó mi primer beso!

¡Adiós! Ese otro amor ha de amargarme tanto,

como el pan que se come lejos, en el exilio,

amasado con hieles y humedecido en llanto.

Olavo Bilac
(Brasil, 1865-1918)

ESTUDIO SOBRE EL HUMOR


Después de un año de una esmerada investigación, un grupo de científicos reveló cuál es el chiste más gracioso del mundo.

En un proyecto calificado como el estudio científico más grande realizado en la historia del humor, la Asociación Británica para el Avance de la Ciencia pidió a los usuarios de Internet en todo el mundo que dijeran cuáles eran sus chistes favoritos, incluyendo sus propias bromas, y evaluó su nivel de comicidad. Después de más de 40.000 chistes de 70 países y dos millones de críticas, el elegido es uno enviado por un psiquiatra de Manchester, Gurpal Gosall.

El chiste mejor recibido a lo largo y ancho del planeta dice así:

“Dos cazadores están en el bosque cuando uno de ellos se desmaya. No parece estar respirando y sus ojos están vidriosos. El otro hombre toma un teléfono celular y llama al servicio de emergencias. Dice jadeando al operador: «¡Mi amigo está muerto! ¿Qué puedo hacer?».

“El operador con un tono de voz calmado y suave le responde: «Tómelo con calma, puedo ayudar. Primero, vamos a asegurarnos de que está muerto».

“Se hace un silencio, luego se escucha un disparo. De regreso al teléfono, el cazador dice: «¿Y ahora qué?».”

Distintos tipos de humor

Los investigadores hallaron diferencias importantes entre los países en el tipo de chistes que encuentran divertidos. Las personas de Gran Bretaña, Irlanda, Australia y Nueva Zelanda prefieren los juegos de palabra:

“Paciente: «Doctor, tengo una fresa atascada en mi trasero». Doctor: «No se preocupe, le podemos poner crema».”

A muchos europeos les gustan que las bromas sean surrealistas o que tomen a la ligera temas serios como enfermedades, muerte y matrimonio:

“Un paciente dice: Doctor, anoche tuve un error freudiano, estaba cenando con mi suegra y quise decir: «¿Podría, por favor, pasarme la manteca».

“Pero en vez de eso dije: «Tú, vaca tonta, has arruinado completamente mi vida».”

Otro ejemplo:

“Un perro alsaciano va a una oficina de telegramas, toma un papel en blanco y escribe: «Guau, guau, guau, guau, guau, guau, guau, guau, guau». El empleado examina la nota y, educadamente, le dice al can: «Aquí hay sólo nueve palabras... por el mismo precio puede enviar otro Guau». «Pero –replica el perro– ¡eso no tendría ningún sentido»”.

Las bromas sobre el matrimonio están entre las preferidas de los estadounidenses:

“Un hombre y un amigo están jugando golf. Uno de los hombres está a punto de golpear la pelota hacia el green, cuando ve un largo cortejo fúnebre en el camino cercano al campo.

“Se para en medio del swing, se saca la gorra, cierra sus ojos y se inclina rezando una oración. Su amigo dice: «¡Oh!, esto es lo más considerado y conmovedor que he visto en mi vida. Realmente eres un hombre noble».

“Entonces el otro hombre responde: «Sí, bueno, estuvimos casados por 35 años».”

La muerte, por su parte, es uno de los temas preferidos de los chistes escoceses:

“Quiero morir pacíficamente en mi sueño como mi abuelo. No gritando de terror como sus pasajeros”.

INSTRUCCIONES PARA ELEGIR EN UN PICADO


de Alejandro Dolina

Cuando un grupo de amigos no enrolados en ningún equipo se disponen para jugar, tiene lugar una emocionante ceremonia destinada a establecer quiénes integrarán los dos bandos. Generalmente dos jugadores se enfrentan en un sorteo o pisada y luego cada uno de ellos elige alternativamente a sus futuros compañeros. Se supone que los más diestros son elegidos en los primeros turnos, quedando para el final los troncos. Pocos han reparado en el contenido dramático de estos lances. El hombre que está esperando ser elegido vive una situación que rara vez se da en la vida. Sabrá de un modo brutal y exacto en qué medida lo aceptan o lo rechazan. Sin eufemismos, conocerá su verdadera posición en el grupo. A lo largo de los años, muchos futbolistas advertirán su decadencia, conforme su elección sea cada vez más demorada. Manuel Mandeb, que casi siempre oficiaba de elector observó que las decisiones no siempre recaían sobre los más hábiles. En un principio se creyó poseedor de vaya a saber qué sutilezas de orden técnico, que le hacían preferir compañeros que reunían ciertas cualidades. Pero un día comprendió que lo que en verdad deseaba, era jugar con sus amigos más queridos. Por eso elegía a los que estaban más cerca de su corazón, aunque no fueran tan capaces. El criterio de Mandeb parece apenas sentimental, pero es también estratégico. Uno juega mejor con sus amigos. Ellos serán generosos, lo ayudarán, lo comprenderán, lo alentarán y lo perdonarán. Un equipo de hombres que se respetan y se quieren es invencible. Y si no lo es, más vale compartir la derrota con los amigos, que la victoria con los extraños o los indeseables.

“Mentiras: la verdad sobre las promesas incumplidas en seis años K"

El periodista Marcelo López Masía cuenta cómo fue la realización del libro “Mentiras: la verdad sobre las promesas incumplidas en seis años K”, cuál fue su objetivo en esta obra escrita junto a Cristian Solís, de qué manera consiguió las fuentes de información y los resultados que obtuvieron.

“Mentiras” es un libro escrito por Marcelo López Masía y Cristian Solís que plantea mediante una gran investigación a lo largo y ancho del país, las diferentes promesas incumplidas del matrimonio Kirchner durante los seis años de mandato.

¿Cuál fue el objetivo que se propuso para comenzar la investigación?

El objetivo del trabajo fue demostrar que los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner utilizan un sistema de comunicación engañoso, que recurre a múltiples anuncios de obras públicas y supuestas mejoras en la calidad institucional que luego no terminan concretándose.

La técnica consiste en llamar a conferencias de prensa para anunciar iniciativas en distintas etapas (presupuesto, licitación, apertura de sobres del concurso, piedra fundamental, etc.). Las mismas, en un noventa por ciento, quedan sólo en su enunciado.

¿Cuál fue el procedimiento de investigación?

Investigamos los discursos del matrimonio presidencial a lo largo de seis años y también repasamos diarios capitalinos y del interior dónde se formularon las más variadas promesas.

Una vez reunidas, recorrimos las 24 provincias buscando las viviendas, autopistas, gasoductos, represas hidroeléctricas, hospitales y realizaciones ferroviarias, con los resultados antes apuntados.

¿Cuáles fueron las técnicas utilizadas?

Grabamos en video cada uno de los vaticinios y fuimos al archivo televisivo para cotejar la realidad argentina con la ideada por los Kirchner.

La reiteración sistemática de esta técnica logró superar largamente al “miente, miente, que algo queda” de Joseph Goebbels.

En la Argentina de los Kirchner, con medios que durante un lustro completo fueron enormemente complacientes en sus coberturas, por lo que asistimos al “miente, miente, que nadie te pondrá en evidencia”.

¿Cómo obtuvo las fuentes?

Para los discursos oficiales http://www.presidencia.gov.ar/

Para las promesas televisivas, desde distintos atriles y palcos, debimos recurrir a archivos privados, ya que ningún canal o productora comercial quiso facilitar o vender el material por riesgo a las represalias, dado el tenor del documental que precedió al libro.

Para las notas en cada provincia, recurrimos a nuestros propios contactos en el interior del país, generados a lo largo de 26 años de trabajo en distintos medios de comunicación.

Para la “data dura” con estadísticas que probaran cada una de las afirmaciones solicitamos entrevistas con cada una de las organizaciones no gubernamentales especializadas en presupuesto nacional, calidad institucional, corrupción, situación judicial, entre otras.

¿Cuáles fueron los resultados obtenidos?

Fueron devastadores, ya que intentamos desde un principio llegar a “cien mentiras” (el nombre que llevo el documental publicado por Perfil), pero terminamos de sumar más de doscientas a lo largo de un año entero de investigación.





CUIDADO CON LOS MEDICOS


- Doctor ¿qué puedo hacer para que durante las vacaciones mi mujer no quede embarazada?


- Llevársela con usted.


- Fui al médico y me ha quitado el whisky, el tabaco y las drogas.


- Pero, ¿vienes del médico o de la aduana?


El post operado al cirujano:


- Doctor, entiendo que se vista de blanco, pero ¿por qué tanta luz?


- Hijo mío, soy San Pedro...


- Doctor ¿qué tengo?


- No se preocupe más mi amigo: cualquier duda la aclararemos en la autopsia.


- No sé qué me pasa, me toco la cabeza y me duele, me toco la nariz y me duele, el pie y me duele;


¿qué tengo Doctor?


- El dedo fracturado.


- ¿Así que tu abuelo murió en la consulta del médico?


- ¿El médico qué le dijo antes de morir?


- Le dijo:


- Cuente conmigo, señor: cinco, cuatro, tres, dos, uno, cero..."