Aunque tardíamente, a casi de 16 años de la reforma constitucional y 89 de la sanción de la constitución de 1921, un gobierno provincial habilita el tratamiento de las autonomías municipales.
Sobre el tema en cuestión, aspiramos que atento la importancia del debate y las consideraciones que se pongan de manifiesto, sean abordadas con la seriedad que el tema merece.
Se trata nada más y nada menos que consagrar legalmente, la autonomía del régimen municipal, la gestión de las autoridades legítimas para satisfacer la demanda de los vecinos y también la asignación de los recursos necesarios para hacer frente a esas obligaciones. En definitiva, desterrar para siempre el régimen centralizado de gobierno adoptado en la República Argentina a partir de la década del 50, que con diferencias de matices todavía impera en nuestro régimen institucional.
Como prueba de ello, basta observar la centralización de los recursos económicos por parte del Gobierno Nacional y la creciente obligación de los Estados Provinciales y Municipales que deben hacer frente a los servicios de educación, seguridad, salud y vivienda entre otros, con escaso o nulo aporte Nacional.
De consagrarse el régimen de autonomía municipal, con la participación de todos los actores de la vida política santafesina, estaríamos materializando una vieja aspiración política de un verdadero estadista de la política argentina, como don Lisandro de la Torre, quién fue el primero en instalar en la República Argentina la idea de la autonomía municipal cuando elabora allá por 1890 su tesis doctoral sobre municipios y comunas.
Seguramente quedará para el futuro que ésta autonomía legal se plasme en una futura reforma constitucional, en tal sentido reafirmamos nuestra convicción que la autonomía debe alcanzar raigambre constitucional para terminar con los vaivenes periódicos de la política y convertirse por ése reconocimiento institucional en factor de desarrollo y progreso regional y local de la sociedad. Imprimir artículo
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