18 años consecutivos de tareas solidarias voluntarias
Un niño murió de frío en la puna desolada
¡ ay qué triste sepultura, cielo abierto y altipampa!
Ay…Guillermo que te duermes,
Abrazándote a tu infancia, al delantal
Y al cuaderno que piadosos te amortajan
Que hay dolores en la Puna
Que hay muchos Guillermos LLampas,
Niños que mueren de frío,
Por ver la luz de las aulas y
Niños que sufren hambre sin saber
Lo que es la Patria…
Puentes del Alma es una agrupación sin fines de lucro que se solidariza y apadrina a escuelas de frontera de Salta, Jujuy, Chaco y Santiago del Estero. A través de diferentes viajes les acercan toda clase de objetos para necesidades que estas comunidades no pueden satisfacer por sí mismas, desde ropa hasta materiales para la construcción. Quiénes son, qué hacen y cómo comenzó todo este proceso de creación de un puente imaginario entre realidades muy distintas a solo unos kilómetros.
Más del 40% de la población chaqueña sobrevive en precarias condiciones por debajo de la línea de pobreza. Doscientos treinta mil chaqueños viven en situación de extrema indigencia, sometidos a necesidades alimentarias básicas. Conjuntamente con Formosa, Chaco es la provincia que presenta los peores indicadores sociales, económicos, sanitarios y educativos del total de estados locales de la República Argentina.
En este escenario, el aumento de la mortalidad infantil corrobora la situación de profunda crisis social que se profundizó durante los últimos años.
Solidaridad, bondad, voluntad, amor al prójimo y grandeza son, entre otras, un grupo de cualidades de las que mucho se habla a diario pero muy pocos tienen.
Puentes del Alma es una agrupación de gente altruista que brinda un servicio educativo y apadrina a escuelas de frontera de Salta, Jujuy, Chaco y Santiago del Estero. Nació en Runciman en el año 1994, pero se extendió a toda la región y hoy tiene su sede central en Venado Tuerto. Con frecuencia realizan viajes a dichas provincias, con el fin de ayudar a cubrir las necesidades de alumnos, docentes y comunidades aledañas a las escuelas. Es que por aquellas zonas, los establecimientos son muy precarios y carecen de energía, agua, alimentos, equipamiento, útiles, etc. En realidad, las necesidades son innumerables y estas almas solidarias tratan de reducirlas. Los viajes son realizados en camiones o colectivos y se les acerca a las comunidades un poco de todo: ropa, útiles, alimentos no perecederos, medicamentos, algunos muebles, libros, calzados, materiales para la construcción, herramientas.
En nuestro país pueden verse realidades muy distintas en cuestión de algunos kilómetros. El norte del país señala muchas diferencias con respecto al centro y sur, allí nada es fácil. Los niveles de desocupación, analfabetismo y desnutrición no son los mismos que en el resto del país y en gran parte son ocultados. Esta agrupación entonces busca acortar esa brecha entre las diferentes provincias, unirlas, y que no haya grandes diferencias. Intenta formar un “puente” para el norte, que pareciera estar separado del mapa argentino.
Comienzos
Puentes del Alma nació en el año 1994 en la Escuela Rural N° 6253 de la localidad de Runciman, Santa Fe. La directora de ese establecimiento, Rita Chaparro de Pardo, asistió en aquel entonces a un congreso de docentes en la provincia de La Pampa, donde las diferentes autoridades comentaban la realidad de cada provincia. Fue en el turno de una directora salteña donde todos quedaron boquiabiertos. Noemí Zambrano, de una escuela del Rodeo de La Falda, en Santa Victoria Oeste, contó a sus pares que sus chicos se estaban muriendo de hambre y frío y el nivel de desnutrición era muy importante. Relató que los planes sociales no llegaban a esas escuelas y no tenían absolutamente nada. Los padres se ocupaban de conseguir con mucho esfuerzo algunos lápices y juntaban paquetes de yerba para usarlos como hojas, para tener un lugar dónde escribir. Al finalizar dicha reunión, Rita Chaparro se acercó a la directora Zambrano y le preguntó si desde Santa Fe podían hacer algo para ayudar a sus pares de Salta, a lo que le respondió: “Nos pueden ayudar de cualquier forma porque acá no tenemos absolutamente nada de nada”.
Meses después se realizó el primer viaje a Salta, emprendido solo por seis personas y algo de ayuda. Rita Chaparro y una docente amiga viajaron con sus respectivas familias con el fin de verificar aquel relato de la directora salteña. Claro que al llegar se dieron cuenta que lo que habían escuchado no era cierto, sino que se encontraron con una realidad mucho peor.
Los niños de la región deben salir al amanecer de sus casas para poder llegar a horario a clases, y muchos hacen semejante esfuerzo porque allí es donde obtendrán su única comida diaria. Al regresar los cubre la noche y el frío se hace insoportable. Para llegar a la escuela se deben caminar entre tres y cuatro horas por senderos estrechos de profundos precipicios, cruzando unas 15 veces un río que pasa por allí. Finalmente, Rita y sus compañeros dieron con el objetivo y acercaron las pocas donaciones que habían logrado recolectar en la provincia de Santa Fe.
En el año 1997, la agrupación comenzaba a tomar más fuerza y se sumaban varios voluntarios de localidades vecinas, como Venado Tuerto y Firmat. Además de gente, se añadía una nueva provincia que necesitaba de gran ayuda: Jujuy. Se emprendió entonces un viaje hacia allí, a una escuela de la localidad de Santa Victoria. Con mucho esfuerzo y organización, las donaciones, que para ese entonces ya eran más abundantes, llegaron a destino.
VENADO TUERTO
Patricia Lúgaro de Bonadeo es la presidenta de Puentes del Alma Venado Tuerto, hoy sede central. Comenzó allá por 2001, cuando algunas personas venadenses ya colaboraban con aquella institución de Runciman. Patricia fue invitada a una reunión donde propuso cambiar un poco la metodología, quería no solo llevar necesidades sino que también solucionar problemas.
Comenzaron a unirse y construirse albergues en aquellas escuelas norteñas, se refaccionaron cocinas y aulas, se equiparon con bancos y sillas, como así también alimentos y útiles. De a poco se iban saciando las necesidades planteadas por las docentes de aquella región. Así se fue sumando gente, amigos y familiares. Gracias a una gran campaña en los medios de difusión, los venadenses iban enterándose sobre la existencia de esta agrupación y acercaban sus donaciones y voluntad para colaborar. Puentes del Alma también comenzó a ganar lugar en toda la región y se fueron formando diferentes agrupaciones en localidades vecinas gracias a las charlas que daba la gente de Venado Tuerto sobre lo que se estaba haciendo.
Desde nuestra ciudad también se pudo sumar una nueva provincia para acercarle ayuda: Chaco. Se realizó el primer viaje al impenetrable con solo seis personas nuevamente. Al llegar, la comunidad Wichi les planteaba que ellos nunca habían ido a la escuela, ya que no tenían posibilidad de llegar hasta la más próxima al lugar y justamente lo que querían era que sus hijos, y sus posibles nietos, tuvieran la posibilidad que no tuvieron sus antecesores. Luego de una gran campaña, Puentes del Alma logró levantar una escuela en el mismísimo Impenetrable chaqueño. Se hicieron cimientos de barro y paja, como ellos están acostumbrados a vivir, ya que no se pretendía cambiar su realidad y sus hábitos sino simplemente mejorarlos. Meses después un temporal terminó con el sueño escolar y todo se vino abajo, por lo que se tomó la decisión de construir un establecimiento como cualquier otro, de cemento y ladrillos. Fueron llegando colaboraciones de distintos pueblos y ciudades y se juntó algo de dinero para pagar los ladrillos que los mismos wichis construyeron. Hoy en día, la escuela está funcionando con total normalidad y los pequeños niños wichi gozan de una aceptable educación.
Finalmente, en este 2012 se incorporó la cuarta y última provincia ayudada: Santiago del Estero. En marzo se realizó el primer viaje a Sumampa, donde habita la comunidad “Corral del Rey”. Allí también se encontraba un gran establecimiento educativo, pero demasiado abandonado. . Aquí la cosa fue un tanto complicada. El gobernador de la provincia de Santiago del Estero ordenó a Puentes del Alma que solo se podían acercar de visita, sin ayudar a nadie, ya que ese era un tema que le pertenecía al estado. La agrupación hizo caso omiso y refaccionó una parte de la escuela. Dejó en óptimas condiciones el cuarto donde se instalaba una docente y su dirección. Además le acercaron bancos y unos pizarrones, ya que como tal utilizaban papeles pegados sobre la pared.
Así este grupo de almas solidarias va abriendo su corazón a diferentes comunidades y regiones del norte del país. Tratando de saciar aquellas grandes necesidades y cambiar la dura realidad que se vive. De a poco y sin descuidar el resto, se van sumando nuevas provincias, nuevas escuelas y cada vez son más los “puentes del alma” que unen a los diferentes corazones argentinos.
Para colaborar
La gente que desea colaborar, lo puede hacer acercando las donaciones a la sede central, ubicada en Ovidio Lagos 114 (Ruta N° 8) en Venado Tuerto, de lunes a sábados entre las 17.00 y 19.00 hs.
Puentes del Alma también retira donaciones a domicilio, pero solo los fines de semana, con una comunicación previa con el donante.
Lo más requerido en estos momentos es ropa de niños y útiles escolares, desde lápices hasta diccionarios o manuales educativos. Recordemos que la agrupación trabaja exclusivamente con escuelas.
Teléfono: 03462-15663154
E-mail: puentesdelalma@powervt.com.ar
CAMPAÑA SOLIDARIA
LECHE, JUGUETES, ÚTILES ESCOLARES, ALIMENTOS NO PERECEDEROS,AGUA MINERAL MATERIAL DIDÁCTICO, EQUIPO ELECTROGENO O PANEL SOLAR, TANQUES PARA AGUA, BOLSAS DE CEMENTO, HARINA, CHAPAS, TABLONES, CABALLETES Y BANCOS PARA COMEDOR, BIBLIOTECAS METALICAS, PARRILLAS, ALAMBRE TEJIDO PARA CERCAR, JUEGOS INFANTILES PARA JARDIN, 100 MTS DE CABLE PARA ELECTRICIDAD Y LLAVES DE LUZ, UTENSILLOS DE COCINA, ELEMENTOS DEPORTIVOS (PELOTAS, REDES, COLCHONETAS), MEDICAMENTOS Y ELEMENTOS PARA BOTIQUIN, ARTICULOS DE HIGIENE, TOALLAS, ROPA DE CAMA FRAZADAS MOBILIARIO DE TODO TIPO, ENTRE OTRAS COSAS.
"LOS HOMBRES CONSTRUIMOS DEMASIADOS MUROS Y NO SUFICIENTES PUENTES"
(Newton)