Uno de los principales poetas brasileños y figura significativa de la vida política en su país. Tuvo una ilustre carrera en la literatura y la política, fue un orador brillante y defendió importantes causas públicas y sociales. Bilac nació en Río de Janeiro el 16 de diciembre de 1865. Estudió medicina, profesión que abandonó por el derecho y éste a su vez por la literatura. Su primera colección de versos, Poesías (1888), le aseguró la fama. A pesar de tener sólo 23 años cuando se publicó, en los poemas ya se ven las cualidades que caracterizan sus obras más maduras: la perfección formal acompañada de una gran sensualidad. Fue figura esencial en el movimiento parnasiano brasileño, que pregonaba la objetividad, la represión de las emociones y la impasibilidad frente a cualquier tema. La perfección del lenguaje y la forma de Bilac logra una gran simplicidad de expresión. ‘Via Láctea’, un soneto perteneciente a la colección de 1885, resume su obra lírica y muestra su variedad de estilo e influencias: el sentimentalismo extremado del romanticismo y la sensualidad de los simbolistas. En obras posteriores desarrolló temas históricos y filosóficos. El cazador de esmeraldas es un poema épico sobre los primeros pioneros brasileños. Tarde (1919), publicación póstuma, es más reflexiva y nostálgica. Bilac fue un activo hombre de letras, escribió crítica y periodismo, dio conferencias y colaboró con otros escritores. Publicó un tratado de métrica e historias patrióticas para las escuelas. Hacía campaña a favor del servicio militar obligatorio, como medio para combatir el analfabetismo y representó a Brasil en el Congreso Panamericano de Buenos Aires de 1910. Llamado “el príncipe de los poetas brasileños”, su obra se respetó y leyó mucho en su día, aunque su reputación decayó durante la época modernista. Murió el 28 de diciembre de 1918 en Río de Janeiro.
Departamento GRAL. LOPEZ
martes, 28 de septiembre de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario